El logo Estonia está ejecutado con tanta precisión que no resultará jamás un problema colocarlo.
De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Estonia es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
Estonia basa su éxito en la fuerza de su gama cromática que rompe el espacio convirtiéndose en protagonista.
Estonia cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
Estonia es una perfecta muestra de cómo un logotipo se convierte en imagen inconfundible de su marca.